El Juego de las Caras de las Emociones
Este es un juego que nos encanta porque no sólo es para entretenerse y reír, además fomenta la importancia de la comunicación emocional. Las caras de las emociones es un juego en el que pueden participar las personas de todas las edades.
Y lo mejor de todo es que no se necesita ningún material en particular para poder jugarlo, sólo las ganas de quienes participan.
Es una versión reducida y más difícil que el famoso y popular Dígalo con Mímica, en este caso hay que transmitir un mensaje pero sólo usando el rostro. Las personas deberán comunicar emociones a través de las expresiones faciales.
Al azar, una persona del grupo es quien inicia el juego, deberá pensar una emoción y tendrá 1 minuto para que el resto del grupo adivine dicha emoción. Sólo podrá comunicarla haciendo gestos con su rostro, no puede hablar ni mover otra parte de su cuerpo.
El juego es mucho más divertido si como regla se fija que hay que adivinar la emoción correcta y no una similar. Por supuesto que esto depende de la edad de quienes estén participando.
Por ejemplo, si se está representando la emoción de “enojado” y alguien del público dice “enfadado” no es correcto. En este caso la persona deberá hacer muecas con su cara para indicar que es una emoción similar y que está “cerca” de adivinarlo.
Cuando una persona del grupo acierta la emoción que se está comunicando, será asignada para representar con su rostro una nueva emoción. La ronda de juego se repite con la misma dinámica y reglas fijadas.
Con el objetivo de que todos y todas comuniquen una emoción, se puede modificar esta última regla y hacer una ronda en la que todos los participantes hagan gestos con sus rostros.